Se fue, pero no sin antes colocar el billete de cien dólares
en su billetera, la verdad, es que tenía varios billetes de diez.
--
A la mañana siguiente Peter se despertó de un buen
humor extraño en el. Recordaba a la perfección todo lo que había estudiado ayer
con Mariana. Se vistió con el uniforme, pantalones grises, camisa blanca y corbata roja. Bajó las escaleras y
desayunó solo, su familia no se había despertado aún.
Luego de desayunar, agarró su mochila y se subió a su
flamante Lamborghini rojo. Condujo unos cuantos minutos hasta llegar a la casa
de su novia, Dolores. Le tocó bocina y ella salió de su casa. Esplendida hasta
con el uniforme del instituto, Dolores estaba con el pelo recogido en una
coleta dorada y brillante.
-Mi amor!! –lo saludó mientras se subía al auto y lo
besaba apasionadamente.
-Hola, belleza –dijo tranquilamente con una sonrisa de
costado, matadora.
Arrancó en auto, y con él las charlas estupidas de
Dolores.
-Ay, no sabés… Ayer después de la práctica te extrañé
tanto, mi amor. Demasiado, ¿por qué te fuiste tan rápido, Peter?
-Tuve que estudiar, Dolo. –respondió secamente.
Dolores hizo puchero –Bueno, no importa, hoy es la gran
noche, ¿no?
Peter estaba confundido. -¿De qué hablás? –preguntó.
-¡Hoy me vas a presentar a tus padres! –dijo
emocionada.
-¿¡Que?! –exclamó Peter. Casi patina en la curva con el
auto.
-Si, mi amor –dijo Dolores -¿No te acordás que hacer
dos días te dije que los quería conocer?
-Dolo, no me acuerdo, amor, para otro día sería más
conveniente… -intentó decir Peter desesperado.
-¡No! – Lo interrumpió Dolores con una voz quisquillosa
y aguda. Su voz de niña caprichosa le salió de adentro. A Peter le disgustó
demasiado esta actitud de su novia, ya era grandecita para hacer esas caras y
poner esas voces, pensó molesto. –Peter, vos me dijiste que yo los podía
conocer hoy!
-¿Cuándo te dije eso? –preguntó alarmada, bajo ningun
concepto quería que sus padres conocieran a Dolores, eso significaría que
estaba en una relación seria y el era él Gran Peter Lanzani, no se ataba a
ninguna mujer.
-¡Peter! –se quejó- ¡Hace dos días, en el auto! ¡Acá!
Peter suspiró, nunca escuchaba las charlas en el auto.
–Bueno, vení hoy a mi casa a las ocho y media, a esa hora recién puedo. Tengo
que estudiar.
-¿Cómo? ¿El estudio es más importante que tu novia? –se
quejó nuevamente Dolores en ese tono quisquilloso que tanto odiaba Pitt.
-Dolores, es a la hora que puedo, si no te queda bien,
lo lamento.
-No, osito, pero no entiendo porque justo ahora le
estas dando tanta atención al estudio si antes no te importaba.
-Dolores, voy a quedar repetidor si no paso el próximo
examen de Literatura. –dijo Peter molesto, odiaba tener que dar explicaciones.
–Que es esta semana –añadió.
Dolo ahogó un grito -¿Cómo yo no sabía de esto?
–inquirió. –Soy tu novia, nos tenemos que contar todo!
-No sé, Dolores, me podés dejar manejar en paz, que
todavía voy a chocar.
Llegó muy enojado al estacionamiento y aparcó el auto
en su lugar de siempre. El mejor lugar, como todo lo que el tenía. Dolores
empezó a besarlo cuando vio que Lucas Lagos entraba al estacionamiento en su Hurley,
media vieja y antigua. Atrás en la moto, una chica morocha lo abrazaba por
detrás. Estacionó su moto, y se bajó el primero, luego le sacó el casco a la
chica y se pudo ver que era Mariana. Es decir, Espósito. Lagos la levantó de la
cintura y la bajó de la moto. Ella se reía. ¿Qué hacía la mina? ¿Engañaba al
novio con Lagos? Espósito no parecía el tipo de chica que pudiera engañar a
alguien. Estaba todo el día pegada a Lagos! Y la llamada de anoche? Si mal no
recordaba le había dicho al chico “Te extrañaba, extrañaba tu voz.” ¿Qué
quería decir eso? Y la pregunta más importante, ¿por qué carajo le estaba dando
vueltas en la cabeza el estado sentimental de Espósito si se estaba besando en
ese mismo instante con una potra?
Lucas pasó un brazo por la cintura a Lali y juntos se
dirigieron al interior del instituto. Se perdieron entre el gentío. Sin
embargo, Peter y Dolores, no pasaron desapercibidos. Todos los ojos se posaron
en ellos, mientras el le tomaba la mano y con gracia y personalidad entraron al
instituto. Eran los reyes. ¿Cómo no iban a serlo? ,Pensó Pitt.
-¿Entendió claramente lo que le dije señor Lanzani? -Bauer le preguntó a Peter de pasada en la
clase de Literatura.
-Clarísimo –Y no pudo evitar posar la mirada en Lali,
que estaba muy entretenida con el celular. Estaba seria y tenía los ojos
cristalinos.
-Profesor! –lo llamó Lali a Bauer. –Puedo ir al baño?
-Bueno, pero apurese, Espósito.
-Sí, sí. –Salió y Peter pudo ver como se le empezaron a
caer las lágrimas silenciosas, pero al parecer nadie se dio cuenta. ¿El novio
le habrá cortado por mensaje? ¿Por qué lloraba?
Lali salió de la clase de Literatura directamente hacia
el baño donde podría llorar tranquila. La verdad era que no daba más. Había
recibido un mensaje de Victorio que decía que no le podía mandar plata por dos
meses. Ella no le interesaba la plata, pero estaba atrasada la renta y con lo
que ganaba no era suficiente. Su trabajo en la biblioteca no le alcanzaba y con
el de tutora, menos. Iba a tener que sacar plata de sus ahorros para la
universidad. Pero eso significaría volver atrás como diez casilleros. ¿Qué iba
a ser de ella? ¡No podía todo sola! Le había mentido a Victorio, le había dicho
que ella podía sola y no, no podía!
Lo único que quería Lali, era que la cuidaran, que la
protegieran. Lucas era su mejor amigo, pero no le podía pedir dinero, no debía,
ni quería. Vico se había ido lejos, atrás de una oportunidad de las que viene
una sola vez en la vida y en el peor momento…
Ese día transurrió muy lento para Lali, lo único que quería
hacer era irse a su casa, pagar la renta del apartamento con un poco de sus
ahorros y quedarse tranquila y encerrada para poder llorar. Desahogarse, estar
sola y en paz. Cuando terminó su trabajo en la biblioteca y cobró su miserable
sueldo se encontró cara a cara con Peter Lanzani.
-Vamos?
A Lali la tomó por sorpresa, con un hilo de voz muy
débil le dijo –A donde, Peter? Me tengo que ir…
-Cómo? No, me tenés que dar clase. –dijo Peter un poco
alarmado, había estado esperando todo el día para estudiar con Mariana,
convenciendose de que la verdadera razón era que no quería repetir.
-No, enserio, estoy muy cansada –dijo en voz baja y
entrecortada. –Me tengo que ir, Peter.
-No, pero tenés que darme clases! Era el acuerdo,
Espósito –insistió él un poco más demandante. –Voy a repetir el año si no paso
la prueba de este viernes!
-No grites, por favor –pidió en un susurro. –Me duele
la cabeza.
-Bueno, pero te venís conmigo, necesito que me enseñes.
Vamos. –No le dio tiempo a reaccionar a Lali que ya la agarró de la muñeca y
practicamente la arrastró hacia su auto.
-Peter, enserio no me siento bien. Hoy no te puedo
enseñar. –Se trató de bajar del auto, pero Peter la retuvo.
-No, me tenés que enseñar, nena. –demandó.
-No. Hoy no. Ya tengo suficientes problemas como para
tener que lidiar con los tuyos también. –dijo en un tono de vos más firme.
-Mariana te lo pido por favor. Necesito que me enseñes,
no quiero repetir el año. –pidio esta vez, mas suplicante.
Lali se subió al auto. –Si me enfermo, toda la
responsabilidad va a ser tuya. –le dijo amenazadoramente.
Cuando el auto había arrancado, Lali se dio cuenta de
algo. –Lucas! –dijo casi para si misma. Rápidamente sacó su celular y discó un
número.
-Lu, me estabas esperando? (…) No, no, tengo clase. (…)
No, sí, estoy bien. (…) Sí, ya sé, bueno,
sí, sí, estoy bien. No te preocupes. (…) Yo también te quiero y mucho. Gracias
por todo. Te quiero. (…) Muchisimo (…) Hasta el cielo (…) Bueno, te tengo que
cortar, Lu. Chau.
-Tu novio? –se atrevió a preguntar Peter.
-No. Lucas no es mi novio.
-Parecen novios –dijo Peter con un deje de amargura en
la voz.
-Bueno pero no somos. –discutió Lali debilmente. –Y te
pido por favor, hoy no me hagas enojar, que no me siento bien. –le suplicó.
-Si, ya sé. –le dijo Peter.
-Entonces por qué me obligás a venir?
-Por qué yo necesito…
Lali lo interrumpió. –Y que hay de lo que yo necesito?
Eh? Solo por ser vos te creés que que lo que vos necesites es más importante
que lo mío?
-No, asumo y sé que es más importante. –dijo Peter
tajantemente. –Nada más, ahora, por favor, callate y dejame manejar.
-Perdón? –dijo Lali indignada mientras arqueaba una
ceja amenazante. –A mi no me mandás a callar.
-Bueno… tranquila, no te enojes, nena. –prendió la
radio y empezó a sonar una canción de rap.
Los dos se quedaron callados hasta que Lali dijo
cansinamente –No puedo escuchar esta música, Peter. –Agarró y empezó a tocar
botones del sofisticado y luminoso estereo de Peter Lanzani, mientras a él se le dibujaba una mueca de
horror en su perfecto rostro, hasta encontrar un tema que fuera de su agrado.
Con la respiración entre cortada y la voz débil,
estacionó el flamante auto y le dijo –Qué… hacés?
-Buscó un buen tema, por qué estacionaste? –dijo
desconcertada mientras seguía apretando botones del estereo.
-Sacá… tus manos… de mi stereo, Espósito.
-Pará que busque un buen tema –dijo ella, sin
percatarse de que estaba Peter estaba perplejo.
La agarró de la muñeca con una fuerza sobrehumana y por
fin le sacó a Lali la mano del estereo.
-Nadie toca mi stereo, nena. –dijo fríamente.
-Ya lo toqué yo. –Dijo
–Y justo que encuentro un buen tema. –Estaba sonando The Kooks, se soltó
del agarre de la mano de Peter y se recostó en el asiento.
-Nadie… Toca… Mi Estereo. –dijo suavemente esta vez..
-Yo… Ya… Lo Hice. –dijo imitandolo. –No entiendo cual
es el problema, es una radio, Peter.
-No es solo una radio, es… No sé que te voy a explicar
a vos si no entenderías nada…
-Tenés razón, no entendería nada. Podés manejar, así
terminamos con esto?
Arrancó y luego de unos minutos, Peter le dijo -¿Así
que te gusta The Kooks?
-Me encanta. Mi hermano los escucha mucho y me los
pegó. –respondió ella mientras se frotaba la frente.
-Ah… Es mi banda preferida.
Al llegar a la casa, la encontraron vacía. Se
dirigieron al cuarto de Peter y sentados en la gran cama de él, se pusieron a estudiar. Peter parecía
absorber todos los conocimientos y se estaba esforzando muchisimo. Lali en
cambio, estaba muy cansada, se le cerraban los ojos. Entre que estaba con la
renta atrasada, extrañando a su hermano, haciendo malabares para obtener las
notas perfectas y con el trabajo de la biblioteca, no daba más.
Cuando ya llevaban tres horas estudiando, Peter se
levantó de improviso y agarró su celular. Se fue afuera para hablar tranquilo y
dejó a Lali sola en su cuarto, arriba de su cama. Era la cama más cómoda del
mundo. De pronto se encontró recostada contra el colchón y sus ojos se
cerraban. No podía evitarlo, sus ojos finalmente se cerraron y se durmió.
Peter volvió a
la media hora de hablar por teléfono con Dolores, diciendole que pasaba la cena
de hoy para mañana porque sus viejos no estaban. Abrió la puerta de su cuarto y
Mariana estaba dormida en el extremo de su cama. Pensó en despertarla y
criticarle su falta de profesionalismo al dormirse en la cama de su alumno,
pero dado que hoy había hecho un gran esfuerzo al venir a darle clase, y que
estaba medio engripada, lo dejó pasar. Además, le hacían falta horas de sueño a
la chica.
Miró la hora, eran las nueve y media. Se dedicó a
seguir estudiando por la siguiente hora. Mirandola de reojo mientras dormía.
Mariana se despertó al poco tiempo de que él terminara de estudiar. Muy
confundida, se despertó, se incorporó y lo miró –No! No! Perdón, Peter! Me
dormí! –dijo apenada.
-No te preocupes. –dijo con una sonrisa torcida que
mataba –Está todo bien.
-Emm… ¿Qué hora es? –dijo confundida.
-Las diez y media. –contestó secamente.
-No! –dijo más para si misma. –Peter, ¿ya terminamos
acá? De estudiar digo…
-Si, ya está.
-Bueno, ehh, me tengo que ir –dijo apurada, mientras
juntaba sus pertenencias.
-Ehh, pará, te vas a ir sola? Yo te llevo, no tengo
ningún problema. –ofreció.
Lali lo miró sutilmente. –¿Seguro?
-Si, tengo que ir a la casa de mi novia, me queda de
pasada.
-Ah –dijo Lali –Bueno, entonces sí, dale.
Diez minutos más tarde, ya estaban los dos sentados en
el auto de Peter, escuchando esta vez un tema de“Coldplay”.
-No tenés tan mal gusto en música después de todo. –le
dijo Peter a Lali.
-Nada de mal gusto en música tengo. Esta es mi banda
favorita, de hecho.
-¿Enserio? –dijo impresionado- No te veía de rockera
Espósito.
-Así como me ves, yo pasé por una fase rockera y
rebelde –le dijo Lali.
Peter rió –Nah, mentira, no te logro imaginar así.
-Si, me delineaba los ojos bien gruesos y me pintaba
los labios de negro o de rojo. Fue divertido mientras duró.
-Y que pasó?
Mis padres murieron, fui aobligada a crecer y madurar
de golpe y tuve que dejarme de pendejadas, pensó Lali para sus adentros. No le
iba a decir la verdadera razón. Empezar a decirselo a todo el mundo era como
finalmente aceptar su muerte. –Nada, lo superé –respondió friamente.
-Te sigo sin lograr imaginar así.
-Ah. –dijo ella simplemente.
-Bueno, llegamos, Mariana.
-Emm, gracias, Peter… por traerme.
-De nada, tomá. –le dio treinta dólares. –Tomá, dale
–dijo al ver que Lali no aceptaba el dinero.
-Es mucho. –Le devolvió el billete de veinte y se quedó
con el de diez.
-Ey, te lo merecés, dale, Mariana.
Ella se mordió el labio, realmente necesitaba el
dinero. –No, tomá el de veinte. –Y se quedó con el de diez. –Chau, gracias de nuevo por traerme. –Salió
rápido del auto para que Peter no discutiera su decisión. Ni bien se proponía
entrar al edificio, su casero, un hombre corpulento y grande de unos cincuenta
años, la atajó en la entrada.
-Me debés dos meses, nena. Doscientos dólares, nena.
Dale, largando la guita. –Le demandó.
-Ay! Si –le respondió nerviosa, su casero no era un
hombre malo, pero cuando se enojaba, daba miedo. –¿Doscientos? Emm, bueno… -Revisó su bolso,
agarró su billetera de las épocas rebeldes y la escudriño con nerviosismo.
Tenía treinta y cinco dólares, incluyendo lo que Peter recién le había pagado.
Estaba en el horno. –Tengo treinta y cinco, le va? Subo ahora y busco más
plata. –Iba a tener que sacar de su escaso fondo universitario. Cosa que había
evitado hacer a toda costa.
-Nena, no tengo toda la noche! Si querés seguir
viviendo acá, largá la guita! –le ladró su casero.
-Por favor, yo subo ahora y traigo más plata, la tengo
enserio. Ya le traigo más. –suplicó Lali.
-Bueno, nena, apurate, te esperó acá abajo, eh! –Gruño.
Mientras Lali subía rápidamente a buscar más plata,
Peter, que todavía no se había ido viendo que a Lali un hombre gigante la había
atajado en la entrada, había escuchado todo. Mariana le debe la renta. ¿Qué,
sus padres no se ocupaban? Bajó de su auto, y le espetó al casero con toda la
convicción que pudo. –¿Cuánto le debe?
El hombre parecía confundido- ¿Yo a vos te conozco de
algún lado, pibe?
-No sé, puede ser. ¿Cuánto le debe la chica?
-Unos doscientos dolares –dijo hoscamente el casero.
Sacó de su billetera unos cuatrocientos dólares. –Tome,
ya está cubierta por unos meses, ¿no? –dijo Peter, los ojos del hombre
brillaron al ver tanto dinero.
-Si, claro, está cubierta. ¿De donde te conozco yo a
vos, flaco? –dijo mirando la cantidad de dinero.
En eso sale Lali, con los ojos rojos y con el dinero
que le iba a dar. –Ya está, nena, tu novio me pagó.
-No es mi novia –aclaró Peter.
-¿Cómo? –Lali estaba confundida. –No, no, no, yo tengo
acá la plata. –protestó Lali infructuosamente.
-Bueno, los dejó, nena, ya estás cubierta por dos
meses, no te atrasés más! –Le advirtió, huraño.
-¿Qué hiciste, Peter? –le dijo Lali empezando a
enojarse.
-Te pagué la renta, ¿no necesitabas eso?
-Sí, pero yo tenía la plata! ¿Por qué lo hiciste?
–inquirió Lali evidentemente molesta.
-Ya está hecho, miralo como una forma de
agradecimiento, Mariana. Yo sentía que te debía por enseñarme, ahora estamos a
mano.
-¡No estamos a mano! Yo ahora te debo a vos –odiaba
deberle cosas a la gente, se sentía mal, culpable. –Tomá, acá tenés doscientos,
cuando consiga más te los doy, no me gusta estar en deuda con la gente, mucho
menos con vos.
Peter se rió y le devolvió la plata. –No, yo después
veo como te cobro la deuda, Mariana.
¿Por qué Peter Lanzani la confundía tanto? ¿Por qué?
Fueron sus pensamientos al tumbarse en la cama para dormir. Solo sabía que le
debía algo a Peter Lanzani.
me encanta!!!! pobre lali!!! podes subir mas?? porfiiiiii!!! la nove esta genial!!!!!
ResponderEliminarMas porfa a
ResponderEliminarSeria genial que peter sepa la verdad de lali
ResponderEliminarincreible tu nove Paz!! cada dia me gusta mas!!
ResponderEliminarmas nove suve otro por favor
ResponderEliminarvas a suvir otro hoy por el que no suvite ayer
ResponderEliminarIncreible tu novela Paz!!! Amor arreglado estuvo bien pero esta nove.... pufff increible!! Me gusta ese amor/odio q hay entre Peter y Lali y espero q pronto haya un acercamiento entre ambos ;) mas noveee!!
ResponderEliminarAyyyy, me hiciste el día.
EliminarLali es firme en sus cosas no le gusta deberle a nadie.Jsjajaja Peter y su equipo d musica dentro d nada Lali pondra lo k le de la gana tocando todo lo k quiera sin k Peter se enfuruñe.
Eliminarme encanta me encantooooo muy bueno el capitulo de hoy, lo esperaba con ansias tuve que abrir mi gmail de hace años para comentarte, la verdad que con lo bien que escribís te mereces que te lo digan. ahora si subí prontooo otro capitulo!!!
ResponderEliminarNahhhhhh sos una genia con todas las letras .
ResponderEliminarQue le ira decir peter a lali cuando se entere de todo lo que ha tenido que sufrir
Lina castillo desde colombia
EYYYYY, 28 COMENTARIOS,,, comentarios en serio, no esos de una sola letra... Y subo otro.
ResponderEliminartus novelas son las mejores que he liedo me alegra el dia cuando vos suves un cap nuevo. tus novelas son las mejores ya que los capitulos son largos y eso creo a todas nos gusta
Eliminarestoy de leer novela es muy bueno hace tener una imaginacion increible... te agradesco por suvir novela ya que se aprende mucho... paz tus novelas son lo mas y me encanta leerlas... espero que peter y lali se besen... paz suvi otro
ResponderEliminarMasssssssssssssssssssssssss noveeeee!
ResponderEliminarmassss pleaseeeeeeeeee!
ResponderEliminarme encantaa!
ResponderEliminarME ENCANTA ESTA NOVE , ESPERO OTRO CAPITULO , ME ALEGRAS EL DIA CUANDO SUBIS MAS DE 1 CAPITULO
ResponderEliminarlina castillo
noveeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarme encanta subi mas
Ooootroooo (: me encanta
ResponderEliminarMaaaas porfiiii xD
ResponderEliminarSubi mas cpitulos porfavor :')
ResponderEliminarAnabel
Amo esta nove enseriomas caps porfas!!
ResponderEliminarnove , subi mas
ResponderEliminaracercamiento please
me encanta esta nove
ResponderEliminartienes twitter , asi nos avisas cuando subis nove , si puedes
ojala hoy puedas subir otro!!! me imagino que cuesta un montón escribir...perooooo estaría bárbaro otro capitulo!! necesito saber como sigue la relación peter/lali, si dolores se va a enterar que peter estudia con lali, lo de los padres de lali, hermano...son muchas cosas...asi que: subi otro porfa!!!!
ResponderEliminarquiero saber la reaccion de los papas de peter cuando el lleve a dolores a su casa
ResponderEliminarnove , recien hoy la empeze a leer :)
ResponderEliminarME ENCANTO
ResponderEliminarMAS!!!
AMO AMO AMO AMO AMO AMO AMO TUS NOVELAS
ResponderEliminarUna porra para Paz que es una genia: Paz, Paz, la mejor que hay, Paz Paz te queremos sin parar ...
ResponderEliminarJajajajaja ok salio medio fea pero la intencion es lo que cuenta ;)
Haaaya me encantaaa que peter termine con dolores proontooo me encata tu nove sique maaas :)
ResponderEliminarMaaas
ResponderEliminarMas noveeeeeeeeeeeeeee!!!!Me encantaaaaaa!!
ResponderEliminarhay pobre lali le pasa de todo
ResponderEliminarencima peter mucho no colabora
quiero otro capitulooooooooooooooooooooo
besos @ari_stafe
Me ha encantado el capitulo, me pongo al dia con la nove y ya tienes nueva lectora
ResponderEliminarNo sabes lo que me gusta su relacion y como la escribis, esa bipolaridad que tienen y las actitudes de Peter que me re sorprenden por momentos, mas nove, en serio me encanta leerte
ResponderEliminaruna delas mejores nove seguro a mi me encanto amor arreglado paz espero q luego subas mas cap.. y me voy porq tengo q estudiar y es rutina pasar por tu blog a ver si subiste mas nove <3 me encanta estoy re metida
ResponderEliminarMe encanta!!! Subi muchos cap, quiero lalier jajaj
ResponderEliminar