La dejó sola en la
habitación. Se fue dando zancadas grandes y furiosas. –La puta madre! Por qué
carajo la conocí? –gritaba cuando llegó afuera. Pateó la arena. Corrió como un
loco por la orilla del mar. Gracias a Dios que estaba desierta la playa. Le
había dicho lo que sentía y ella lo desechó así como si nada. Por más que dijo
que lo amaba, lo había rechazado. Lloró y lloró… pero lo rechazó. Me rechazó. A
mí. A Peter. No, era inconcebible, carajo.
De vuelta en la casa,
Lali estaba acurrucada en su cama. Tuvieron que pasar semanas, antes de que
Lali y Peter tuvieran una conversación sin echarse miradas asesinas, ni miradas
sugerentes, fulminándose con la mirada, ni nada de lo que hacen las personas
normales al conversar tranquilamente.
Pablo, como podía, la
remaba, trataba de hacerlos reír, de sacarlos de sus pensamientos cuando se
quedaban como en un coma, más o menos… Era difícil. Pero, bueno. Luego de
semanas, se podía decir que habían alcanzado el nivel de comunicación normal
para lo complicada que era la situación.
Cristóbal venía con
mucha frecuencia, nadie lo llamaba, pero venía cada dos semanas a hacerle
chequeos a Lali. Por supuesto todo iba perfectamente normal, pero él insistía
en venir. Pero como cada vez que venía, venía con el ecógrafo, nadie
protestaba.
Mecha se había ido un
mes después de la isla debido a que tenía que solucionar unos trámites de la
muerte de su esposo y organizar algunas cosas. La despedida no fue del todo… estuvo
más o menos bien… como que fue un desastre.
-Ma, estás segura que
no querés que yo me ocupe de ese tema? Mirá que yo puedo. –se ofreció Peter por
enésima vez.
-No, hijo, vos tenés
otras cosas más importantes de que preocuparte. –Señaló a Lali con la mirada. –No
te preocupes por mí. –Dijo mientras se
ponía la mano en la frente y dibujaba en su rostro una expresión típica de las
tragedias.
Pablo suspiró
disimuladamente, Peter también. Lali, por el contrario bufó y suspiró sin el
menos disimulo.
Mecha se hizo la
tarada y no le contestó nada. –Hijitos, los amo con toda mi alma. –Abrazó a sus
hijos, trágicamente también, como si no los volviera a ver en toda su vida. Los
llenó de besos, los abrazó, lloró.
Casualmente, Lali ese
día estaba muy irritada (por si no era obvio). Le molestaba ver a Peter, a su
suegra, a María, a las mucamas que le tiraban onda a Peter y a Pablo (porque
ahora también le tiraban onda a Pablo), le molestaba que se hubieran terminado las
frutillas, le molestaba que nadie hubiera comprado más y le molestaba ese dolor
de cabeza constante que estaba teniendo. Sobre todo le molestaba, le irritaba y
le jodía el llanto incesante de su suegra.
Con un sollozó
increíblemente fuerte, los siguió abrazando y besando a sus hijos. –Bueno,
basta! Ya está! –dijo Lali molesta. –Corte
el llanto.
-Perdón? –Su suegra salió
de los brazos de sus hijos. –Nena –puso la cara más trágica de víctima y mártir
que pudo. –Se acaba de morir mi esposo! Lo menos que me sale hacer es llorarlo,
nena. Pero claro, nena, vos no lo entenderías… Siempre rebelde, desubicada,
malcriada, nena rica…
Lali abrió mucho los
ojos y la boca y lo miró a Peter y a Pablo con los ojos mesuradamente abiertos.
–Perdón? A ver, Mecha, primero que nada, nena rica, nena rica! Nena rica!!? Yo?
Nada que ver, yo tengo más calle que usted, sus hijos y toda su familia… Y sí,
mi familia tenía guita, pero no tengo nada de nena rica ni de malcriada!
Su suegra la miraba
con la boca abierta, sin emitir ningún sonido, ante los gritos de su nuera.
-Además! Usted llora,
porque me enteré que su esposo… No la incluyó en el testamento! –le gritó Lali
con los ojos en llamas y una sonrisa de suficiencia. Lali se calló unos
instantes para respirar, se dio cuenta de que todas las mucamas de la casa la
miraban, incluidos los Lanzani.
-Qué desubicada! Hijo!
Vos viste lo que tu esposa me dijo? –Mecha estaba escandalizada.
-Sí, mamá. No es nada
nuevo. –dijo Peter en un suspiro. –Te acompaño a la lancha… Venís, Pablo?
-Ehh, sí, ya venimos,
Lali…
Lali suspiró muy
enojada. –Hagan lo que quieran. –Se sentó en el sillón bruscamente.
Luego de que se fuera
su suegra, las cosas se tranquilizaron por la casa, el embarazo estaba en su
sexto mes. Pero Lali, de igual manera, no dejaba de hacer nada por el embarazo,
ella hacía de todo. Iba, venía, caminaba, saltaba, corría, danzaba… Típica
Lali. A pesar de que Peter le insistiera, claro.
Una tarde, a las
cuatro, más precisamente, estaban Pablo, Peter y Lali en el living mirando
películas. Miraban películas muy a menudo porque la colección de películas de
los Lanzani era semejante a la de un video club. Como siempre las frutillas con
crema, no faltaban.
Entonces, estaban los tres
mirando una película de terror, las favoritas de Lali, y comiendo las
infaltables frutillas cuando…
-Peter, podrías venir
un toque? –Lo llamó María “inocentemente”. María, a diferencia de amiga, Mecha,
no se había ido. Lali estaba muy molesta por ese hecho, pero no decía nada, de
hecho, esperaba que Peter tuviera las pelotas como para echarla de la casa.
Pero, no. En los dos
meses que hacían de que su suegra se había ido, María se había quedado… o sea,
no era que tenía un trabajo muy demandante, y que era super solicitada y
exitosa? Qué carajo hacía en una isla por tantos meses, entonces? Lali no lo
entendía.
-Ehh… sí, qué
precisas? –Peter se levantó del sillón vacilante, intercambió una mirada con su
hermano.
-Me abrochás el
corpiño? –Pidió con una sonrisa “tímida”. Lali puso los ojos en blanco.
Aunque con Peter las
cosas estaban lejos de estar bien, le molestaba ver que la tocaba a ella. Le
irritaba. Decidió usar el as bajo la manga.
Puso su cara más
tierna posible y exclamó. –Ay! Pitt, la nena está pateando! –Si algo no se
podía decir de Peter era que no le importaba la nena, cada vez que pateaba,
Pitt estaba ahí, cada vez que venía Cris con el ecógrafo, Pitt estaba ahí. No
se había perdido ni un solo chequeo. Era un padrazo.
Peter soltó el corpiño
y se fue al lado de Lali inmediatamente. Puso una mano en la panza de seis
meses y luego con sumo cuidado puso la oreja. –La miró a Lali con una expresión
en el rostro que solo podía ser descrita como felicidad.
-Ay, Peter! –dijo María
con una risita –Te olvidaste de abrochármelo.
-Eh… ahora no, Mery,
está pateando la nena, dijo simplemente con una sonrisa, como si en ese momento
no importara nada.
-Ah, la nena… -dijo
con desprecio.
-Eh, flaca, que decís
la nena con ese tono? –dijo Lali enojada. –Metete con alguien de tu tamaño.
-Ey, no te alteres –le
dijo Peter. –Se altera la nena si no…
María puso los ojos en
blanco. –Peter, -dijo Lali en un
susurro. –Se está burlando de nuestra hija, hacé algo. –La nena pateaba como
loca adentro de la panza de Lali.
-Ey… -empezó Peter.
-O sea, Mariana, no
dije nada malo, o sí? –se sentó en el sillón con aire resuelto, mostrando sus
largas piernas. –Ey, dicen que sale petisita como la mamá? –dijo con una
sonrisa burlona.
-Te mato. –dijo Lali
tratando de levantarse del sillón, pero Pablo la agarró y la sostuvo.
-La… no te alteres… -suplicó
Peter. –Enserio, no te debe hacer bien.
-Hacé algo si no
querés que me altere. –le dijo ella a él echando fuego por los ojos.
Lo miró y ella supo
que él la tenía clarísima… No era tan boludo, al fin y al cabo.
-Mery, vení un toque. –le
dijo Peter. La llevó hasta la cocina y fue muy directo. –Te lo voy a decir así,
sin filtro, ok?
-Dale, vos me podés
decir a mí lo que quieras, Peter. –dijo ella llevando la mano al pecho.
-Bueno, te tenés que
ir. No da para más, ya sé que tuvimos un encuentro… fogoso? Bueno, un
encuentro, pero ya está, me quiero concentrar en lo que importa en este
momento, que es Lali y la nena.
-Lali no parece querer
concentrarse en vos. –Dijo ella despechada.
-No, tenés razón, no
parece. –Estuvo de acuerdo él. –Pero quiero estar con ella, de cualquier modo,
hasta siendo su ex, pero quiero estar cerca de ella. Te lo pido por favor,
quiero terminar en buenos términos, Mery.
Ella suspiró. –Cuando querés
que me vaya? –preguntó ella, rendida.
-Ahora mismo si no es problema.
–dijo el calmado, sereno.
-Bueno… hago los bolsos
y me voy, Peter. Quiero que sepas que… que lo de hace tiempo…
-Lo de hace cinco
años?
-Sí, eso, que tus viejos
no tuvieron nada que ver. Sí, es verdad, nos trataban de juntar, pero de ahí a
drogarte… esa fui yo –dijo ella con una sonrisa de disculpa.
-Todo bien. Bueno, no,
todo mal, pero bueno… ya se van a arreglar las cosas, no te preocupes.
-Bueno, Peter, nos
estamos viendo?
El negó con la cabeza.
–Vos sabés que no, Mery. Fue… divertido mientras duró, pero ya está. Yo la amo
a ella.
-Raras elecciones las
tuyas… -ella se carcajeó.
-Raras, pero las
mejores. –declaró el con una sonrisa.
--
Cuando Lali vio que
María salía con cinco valijas de ropa gigantes por la puerta principal se quedó
boquiabierta. Pablo también.
-Qué….?
-Ya está –dijo Peter frotándose
las manos. –No hay más nadie en esta casa, además de nosotros tres y las
mucamas. Que les dí el día libre.
-Pitt… vos la echaste
a María? –dijo Lali muy despacio.
-Sí. –Lali empezó a
saltar de alegría.
-No lo puedo creer!
Gracias! –Lo abrazó a Peter. –Gracias! Gracias! Gracias! Peter, la echaste! –dijo
sin creérselo todavía.
-Sí, la eché… Bueno,
no es que la eché, fue más como una invitación a tomarse el palo.
-Bien! –dijo ella sonriendo. Inclinándose más solo para que Peter pudiera oírla
le dijo. –Estoy orgullosa de vos, igual… no te emociones porque es la primera y
última vez que me vas a oír decírtelo.
por fin!!!! espero mas acciones de peter iguales a esta!!! y que esten juntos!!! subis mas??? por favor!!!
ResponderEliminarjajajaj mas
ResponderEliminarAaaah que hermooooso
ResponderEliminarQue vá a pasar ahora?los 3 solos....jajajaja que buenooo
ResponderEliminarPor fiiin te volviste hombre de verdad peter jajajajaj
ResponderEliminarNoveeeee
ResponderEliminarMaratooon
ResponderEliminarMASSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS HAZ UNA MARATON CUANDO PUEDAS :D
ResponderEliminarYo que tu dejo a lali con cristobal un tiempo total peter es siempre el que la caga que ahora sufra viendola harto tiempo con otro como ella aguanto con mery.
ResponderEliminarsube mas :D
SIII ME GUSTA LA IDEA!
Eliminary que cristobal sea re corinoso con lali y ella con el xD
ResponderEliminarSII ME SIGUE GUSTANDO LA IDEA! Buajajaja
EliminarQue peter sufra un poquito, por los celos jaja
ResponderEliminarme alegro mucho que hayas subido capi
ResponderEliminareres una genia escribiendo
lina castillo
noveeeeeeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarcuantos capis va a tener esta nove ???????????????
no te lo sabría decir... no esta terminada lo que pasa
Eliminarmaass
ResponderEliminaral fin hizo algo bien!!
noveeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarfelicitaciones a peter porque hecho a maria
otrooooooo
ResponderEliminarcapituloo
ResponderEliminarmasss
ResponderEliminarHasta que Peter hecho a María! Bien hecho!
ResponderEliminarTanta visita de Cristobal?? me parece que ahí hay algooo
ResponderEliminarSe quedaron los 3 solos! Bien! pero...porqe no se van? que esperan ahí?
ResponderEliminarmas nove
ResponderEliminarsubis hoy?
ResponderEliminarSi que Lali este un tiempito con Cristobal, si el esta muerto con ella, o que disfrute Lali de la compañia de Pablo mas qe la de Peter y ahí Peter empiece de nuevo a enamorarla
ResponderEliminarme encanta!
ResponderEliminar1 bien hizo ! porfin!!!!
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